ARBOLES CENTENARIOS DE CAN GENE. VIDRERAS

Buena mañana para salir a rodar y perfumarnos con los olores y fragancias que nos otorgan los días primaverales surcando esos preciosos caminos que nos acercan hacia los bosques de la comarca de La Selva. El lorenzo ya empieza a picar con fuerza haciendo acto de presencia de buena mañana. El tema que proponemos hoy, visitar los arboles centenarios de Can Gene de Vidreras; un rodar pausado y sin prisas, nos hace disfrutar y mucho, de los caminos que vamos contemplando a cada golpe de pedal que vamos dando. Se nota la buena temperatura en el ambiente porque a lo largo de nuestra rodada hemos encontrado a mucha gente haciendo deportes varios y numerosos bikers disfrutando de estos caminos. Hoy sinceramente, no hemos
estado solos. Una vez que llegamos a las puertas de Maçanet, repostaremos nuestros bidones de agua en la fuente de la oreja haciendo un breve avituallamiento para entrelazar caminos proximos a Vidreras.
Los verdes prados con sus respectivas masías labradas en piedras rusticas, nos acompañaran largo y tendido hasta que nos aproximemos al parque de bomberos de Maçanet.
Una vez allí la nacional espera para cruzarla en dirección Can Castell y dirigirnos hacia el polígono industrial de Vidreras.
A partir de aquí, todo sera ir en linea recta pero con algún despiste por parte nuestra que nos ha hecho perder algo de tiempo al equivocarnos de dirección. Nada sin importancia, porque en seguida hemos vuelto a enlazar con la pista correcta. La planicie de estos caminos te hacen sentir bien cómodos porque después de algunas subiditas que hemos tenido que hacer, las piernas de algún modo te lo agradecen; la velocidad como es lógico va subiendo y a poco, ya divisamos el gran castillo de Sant Iscle entre las montañas.
Nosotros nos desviaremos hacia la derecha justo en el cruce de Can Gene, antes de encontrarnos con la fortificacion medieval, puesto que queremos visitar esas dos maravillas centenarias que sin duda alguna, quitarían el hipo a cualquiera.
Menudos troncos vemos allí!!!!!! las fotografías cantan por si solas. Si, si, si... ya se que estaréis pensando, el Roure era mas grandeeeee!!!!!! no os lo vamos a discutir, pero todo tiene su pequeño encanto y estos dos arboles sin duda lo tienen; solo con mirar el tronco de uno de ellos, tan retorcido que tiene y el grosor de la madera, aunque por dentro este hueco, merecen la pena de por si, ser visitados.
Continuaremos contemplando por unos momentos mas, las enormes estructuras que aguantan las viejas y duras ramas antes de partir de nuevo hacia nuestro lugar de origen.
Mientras, haremos unas fotos para el recuerdo; la vuelta es larga y hay que dosificarse porque el calor y el viento vuelven a incorporarse en la rodada, para fastidiarnos un poco mas y desventajarnos en tiempo.
Ruta de 53 kilómetros compartiendo buenos momentos acompañados por bonitos paisajes y detalles encarrilando unos pocos kilómetros mas por la NII ya de regreso a casa, pero disfrutando en el cambio de provincia, con un camino de bajada muy, muy guapooo que nos deja en el aeromodelismo de Tordera.
Esperamos que haya sido de vuestro agrado, el narrar de nuestra crónica; un saludo a todos nuestros colegas y seguidores!!!!!!!!