Allá a donde huela a aventuras, allí que nos plantamos. Hoy visitaremos un polvorin en deshuso muy cerquita de Chinchilla; zona militar o de acuartelamiento donde hemos podido recorrer muchos de sus olvidados rincones, husmeando y bien, todas las partes del polvorin; incluso, los interiores de los bunkers. Aunque la mañana no ha sido perfecta meteorologicamente hablando, la ruta si, bastante plácida. Cuando llegamos al acuartelamiento de buena mañana, una manada de conejos plasman en el camino su rutinaria batalla; comer y salir huyendo en cuanto nos ven.
Las palomas también hacen su apto de presencia revoloteando entre las innumerables ruinas de los edificios; algunos de ellos, convertidos en auténticos palomares abandonados.
Los bunkers o angares mimetizados, empiezan a destacarse allá a lo lejos junto a alguna torreta de vigilancia; escombros y pinchos del ejercito en el suelo, hacen que tomemos algunas precauciones. El tiempo no parece aliarse hoy con nosotros, esas nubes negras seguro, que agua traerán. Mas fotos para inmortalizar el angustioso paraje, realmente pone piel de gallina estar aquí; meterse en uno de estos inmensos angares y escuchar el estruendoso eco de tu voz, es en parte un poco tétrico.
Vuelta por todo el perímetro y donde por fin, accedemos a curiosear ciertas estancias ( patio de armas, la galería de tiro, el aula de teóricas, la enfermería, etc, etc.... ) el tiempo no pasa en balde; la investigación continua, el clic de la cámara no para de sonar, nuestros pasos al andar entre las ruinas de las edificaciones fantasmagoricas, hacen que sean incluso demasiado sonoras en medio de un tremendo vació; puesto que no se escucha nada, o a veces, el aleteo de una paloma incluso, nos llega a asustar y mucho!!!!!! ciertas curiosidades llaman mi atención; como por ejemplo, dos cajas enormes de madera que en su día seguro estuvieron llenas de munición, o también destacar las numerosas balas detonadas que hemos encontrado a cada paso.
El escudo también fue algo que nos sorprendió y mas aun, encontrar una pelota de tenis desgastada por el paso del tiempo y que a cuantos soldados no entretendría cuando en su día jugaron con ella. Empieza a llover con ganas y todavía no hemos acabado de recorrer todo lo que falta; no nos queda mas remedio que refugiarnos en dichos mausoleos hasta que arrecie el aguacero. Mientras los caracoles salen de sus guaridas, nosotros ya empezamos a salir de la nuestra; parece que amaina y nuestro misterioso caminar sigue su curso.
Las perreras también son muy destacables a lo largo y ancho del entorno puesto que hay un gran numero de ellas. La parte final, la dedicaremos a visitar el edificio principal; muy amplio por cierto, donde los mandos accedían al control del cuartel y demás.
Visita obligada también a la enfermería donde sus grandes finestrales hacían buenas vistas a los enfermos, sin duda. Fin del trayecto y vuelta a Chinchilla donde haremos unas cervecitas y donde hay que poner gas a la bike si queremos llegar antes de que nos vuelva a caer otro chaparron. Por cierto, no tuvimos tiempo y acabamos empapados dirección al castillo; las aventuras son así, y por suerte o por desgracia, el limite es arriesgar.
Eso es todo bikers, nos vemos en la próxima!!!!!!!!!
Véase galería fotográfica de la ruta.
Ver, vídeo ! ! !
Ésa edificación está despoblada desde hace un par de décadas aprox. y cada vez que paso junto a ella por la autovía me apena ver su proceso de deterioro. Supongo que se le podía haber previsto una nueva finalidad a un complejo como éste en lugar de dejarlo en total proceso de ruína. Pero supongo que las distintas administraciones públicas han estado muy ocupadas durante todo éste tiempo en otras cosas como para decidir distinto fin a ésta instalación.
ResponderEliminarA pesar de tenerlo tan cerca, núnca he tenido la oportunidad de acercarme, así que lo he conocido a través de vuestro blog.
Saludos.
Ya veis. Habeis podido comprobar lo que le sucede a los pueblos que nos declaran la guerra. Hace algún tiempo ya, que nos encargamos de ese cuartelucho.
ResponderEliminarLos cuernos de la GHOST deberéis sacar para contiendas futuras en que os oséis a adentraos por estrechas trialeras... son un peligro mayor que el enemigo, os lo decimos los platicos, que hemos sufrido más de una peligrosa caída por culpa de los cuernos... preguntad y veréis, al final, cuando cambias los anchos caminos por los estrechos carrilillos, los cuernos se convierten en todo un enemigo...
ResponderEliminarmais um belo passeio. Só não pode tomar tiro rsrssss . forte abraço do Brasil
ResponderEliminarSoy uno de los platicos mordidos por los dientes afilados de los cuernos, si vais por pistas anchas no hay problemas, pero por trialeras......se me enganchó en una rama y salí volando literalmente....resultado, esguinze intercostal, aun fue poco para lo que podia haber sido....
ResponderEliminarHermosa y tenebrosa la ruta que habéis escogido. He recordado mis tiempos de servicio militar obligatorio en una base construida por los yanquis en Salinas Ecuador la cual tenía un aspecto muy parecido al que se aprecia en sus fotos. También me he quedado con unas ganas terribles de probar aquellos deliciosos platos que se ven. Suerte y sigan publicando. Por cierto la música es hermosa.
ResponderEliminarYo hice la mili en ese cuartel y la verdad me da mucha pena verlo así.Despues de tofo lo que trabsjamos los de mayo del 88 para construir la piscina
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