SANTA MARÍA DE ROCA ROSSA.

Gran ruta la de hoy, aunque bastante dura por cierto. Entrelazábamos caminos de buena mañana hacia pistas de Palafolls para comunicarnos con Sant Genís de Palafolls y sus primeras rampas. El cielo nos auguraba una buena meteorología, y vaya si se cumplieron los pronósticos....!!!!

Anduvimos ligeritos cuando cruzábamos la siempre población de Tordera, insisto, pueblo que comunica con cientos de rutas hacia el Montnegre y por otras tantas del entorno. Habíamos pasado por el barrio Sant Andreu para bajar a los estanques de Can Torrent y dirigirnos hacia la riera de Mas Matas. Uffff...., menudos cuestones nos hemos encontrado por esta zona.

Terreno seco, empinadísimo, con rampas del 15 y con un calor bestial hasta poder coronar la primera cima que nos dejaría justo en la mitad de la carretera de las Ferreras aprovechando así un rodar entre magnificas panorámicas.

Nuestra idea de hoy, era coronar el antiguo monasterio de Roca Rossa, ya lo habíamos hecho en varias ocasiones y hoy nos volvía apetecer de nuevo. Esta es una gran zona para hacer piernas y también una gran zona para los amantes del descenso.

El calor continuaba apretando, y después de tanta ascensión decidimos pararnos en la única fuente que hay por este lugar. Bien fresquita nos sabia a gloria bendita....!!!!

Solo podía mirar el kilometraje y el desnivel que llevábamos, no estaba nada mal cuando por fin nos encontramos delante del histórico monasterio. Miraba hacia atrás y me decía a mi misma, buff, lo que hemos dejado atrás, gran ruta, si señor....!!!!

Anduvimos entre sus ruinas maltrechas, destruido por un gran terremoto de la época. En sus muros aun podemos observar las grietas de aquella catástrofe que dejaron huellas visibles al día de hoy.

Calor, calor y calor, nos deshacíamos hoy por las montañas, había que tomarse algo fresquito y decidimos pararnos en el bar Can Manel de la urbanización. Unas birras para continuar con la ruta hacia pistas chulas de Fogars y sus suculentas bajadas, que ahora ya tocaban después de un duro y largo ascenso.

Las pistas de hoy no es que estuviesen en las condiciones mas óptimas, había que andarse con ojo y descender con mucho cuidado, mas bien parecían pistas del desierto, muy arenosas. Así y de esta manera conseguimos llegar hasta el bosque y seguir la pista que nos dejaría delante del pí gros.

Pasábamos por delante de la masía de Can Ferrer de Sant Ponç y nos dirigíamos hacia el paraje de su ermita. Calor y nieve por el camino, je, je, je.... puros contrastes.

Desde aquí carretera y manta para volver a la siempre población torderenca volviendo a subir por los estanques de Can Torrent y escalar hacia el castillo de Palafolls.

Gran ruta, con un gran desnivel y un puñado de rampas para apretar los dientes. Os dejo todas las fotos y como siempre el track de nuestra aventura de hoy. Que la disfrutéis, bikers....!!!!